Venciendo la Negatividad

Venciendo la Negatividad
Por Brian Houston

¿Te encuentras controlado por lo que quizás pasará o por lo que piensas que no puedes hacer? ¿Ves el vaso "medio vacío" o "medio lleno"? La naturaleza humana tiende a enfocarse en lo negativo. Por ejemplo, el público presta el oído para notar cuando un empresario, ministro o político comete algún acto inmoral o fracasa en las finanzas. Pero, por supuesto, por cada líder que cae hay miles de hombres y mujeres fieles que a lo largo de su vida demuestran diligentemente una ética intachable.
Un gran porcentaje de personas no son conscientes del impacto que la negatividad tiene en sus vidas, pero puede literalmente destruir sus destinos y robarles una vida satisfactoria y abundante. La negatividad tiene el poder de impedir que desarroles tu potencial y pierdas el plan que Dios tiene para tu vida.
La negatividad siempre refleja frustación interior
Jesús dijo: "porque de la abundancia del corazón habla la boca." (Mateo 12:34) Es muy fácil averiguar lo que hay en el corazón de una persona simplemente escuchando cómo habla.

¿En tu vida cotidiana nunca te ha puesto a escucharte hablar a ti mismo? ¿te das cuenta de la ansiedad que expresas o de la desesperación que confiesas? Esta actitud se ve reflejada aun en los comentarios más sencillos.
La negatividad refleja frustración interior. A menudo se manifiesta en contra de las circunstancias, la gente o el gobierno. Le echa la culpa al padre, madre, líder, jefe o cónyuge. Sin importar la circunstancia, creo que la negatividad no tiene que ver con estas cosas. Tiene que ver con el individuo y lo que ocurre en su interior.
La negatividad siempre se autojustifica

"Todos los caminos del hombre son limpios en su propia opinión. Pero Jehová pesa los espíritus."(Proverbios 16:2)

Generalmente podemos justificar nuestros pensamientos y acciones. Normalmente tenemos buenas razones para sentirnos heridos, pero autojustificarnos no cambiará nada. Solamente nos da una excusa para aceptar la mediocridad y el fracaso.
La negatividad intenta justificarse llamando la atención a nuestras experiencias. A veces la religión se autojustifica a base de tradición y experiencia. Sin embargo, debemos mantenernos firmes en nuestra determinación por alcanzar el éxito, porque tan pronto como empecemos a autojustificarnos nos negaremos la oportunidad de cambiar y crecer.
La gente negativa se basa en sus experiencias negativas para crear sus creencias y opiniones y después justifican su posición echándole la culpa a lo que les ha sucedido. Una persona positiva tiene muchas más probabilidades de cambiar y alinearse con su potencial.
La negativida te escoge tus amigos
"El que anda con sabios, sabio será, mas el que se junta con necios será quebrantado." (Proverbios 13:20)
Necesitamos tener mucho cuidado al escoger con quién pasamos nuestro tiempo y quién dejamos que nos dé consejo. ¿Son gente que están yendo hacia arriba o simplemente gente que disfruta en su negatividad, autocompasión y mediocridad sin avanzar para ningún lado? ¿Sus palabras te inspiran a que te conviertas en la persona que fuiste creada para ser, o te desaniman y distraen?
La dirección en que se dirigen tus amigos tendrá una influencia poderosa sobre tu futuro… si tú se lo permites. Una persona que ha decidido vencer la negatividad y cumplir su destino no puede permitirse el lujo de ser detenida por amistades como éstas.
La negatividad magnifica y distorsiona la verdad
"La ansiedad en el corazón del hombre lo abate, mas la buena palabra lo alegra." (Proverbios 12:25)
La ansiedad se base en lo que QUIZáS pasará. Afecta cada área de tu vida y se amplifica en el "¿Pero qué si...?" ¿Pero qué si me enfermo? ¿Pero qué si pierdo mi trabajo? ¿Pero qué si mis hijos sufren un accidente?
La negatividad y la ansiedad operan juntas. Una persona ansiosa o deprimida no ve claramente. Su perspectiva en la vida está desproporcionada. Las cosas pequeñas parecen enormes. Una montaña de hormiga parece una montaña invencible.
Si tú estás viendo el mundo con un corazón lleno de cinismo y amargura es muy probable que tu perspectiva de la verdad se magnificará y distorsionará de una forma destructiva.
La negatividad generaliza y juzga a los demás

Cuando el Rey David empezó a danzar con gozo y alegría entre la multitud, su esposa Mical lo miró con desprecio. A causa de sentirse avergonzada llegó a hacer comentarios tan sarcásticos como: ¡Cuán deshonrado ha quedado hoy el rey de Israel!
¿Cuál era el verdadero problema: el hecho de que David bailó, o la condición negativa del corazón de Mical que la llevó a juzgar de tal manera?
Es muy fácil observar a la gente desde la distancia y juzgar en contra de ellos. Tristemente, la necesidad de criticar y desanimar a la gente viene de una condición negativa en el interior.
La negatividad te robará el gran futuro que Dios tiene para ti, así que reta la negatividad en tu vida. Puedes empezar a cambiar las cosas a través de crear un buen fundamento y viviendo según la Palabra de Dios.


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